Maria Magdalena - Sigan Adelante

Alexiis, 14 de noviembre, 2009

Amados Maestros son las siete menos cuarto de la mañana, estoy aún acostada, pero el plato está girando a lo loco, así que prefiero conectarme antes de que me llamen otra vez en un momento en que no puedo atenderlos.

Les pido mil disculpas pero anoche fue imposible, tanto a las 3 de la mañana, como a las 5 de la mañana. Yo no podía recibirlos, simplemente no estaba en condiciones y no sé si ahora lo estoy, pero lo trato ya que después me tengo que dedicar a tareas que me corresponden como ser humano. Quedo esperando con todo mi amor….

La presión que siento es muy grande pero no sé si es del cansancio o del llamado de ustedes, no tengo idea de lo que pueda ser. Trato de elevar mi vibración, reconozco que no es alta, pero hago lo mejor que puedo.

Hay muchos nombres que me dan vuelta en la cabeza….

Soy MARIA MAGDALENA, Alexiis, vengo en nombre de todos nosotros y reconozco que hace falta que recuperes un poco tu normalidad porque sabemos perfectamente que si nosotros te llamamos, aunque sea en medio de la noche, y estás más o menos equilibrada y estás bien, nos recibes.

Pero también reconozco que a nivel humano esta última semana ha sido tremenda para ti de una cosa tras otra, una cosa tras otra, y esto culminó anoche directamente en que no dabas más.

Claro, nosotros vemos el panorama total, pero muchas veces, salvo en casos específicos como ahora, me estoy dedicando a ver tu aura, a ver tus vibraciones, para ver lo que pasa. Entonces por ahí no nos damos cuenta que alguien en un momento dado no está – digamos – en las condiciones óptimas como para conectarnos.

Sé que no es falta de voluntad ni nada por el estilo contigo, aprecio todo eso, pero también sé que reconoces que la situación necesita de una mayor información de la humanidad en cuanto a lo que está sucediendo. Está sucediendo mucho, hay muy poco o casi nada de ello que aparezca en sus medios de comunicación oficiales, los mantienen completamente sin información, porque como están manejados por la oscuridad, no quieren que ustedes sepan que están siendo ayudados, aunque ustedes no se den cuenta de ello.

Estamos interviniendo en muchísimas cosas ya pero sé que eso no sale a la vista del público en general. Todo eso cambiará, día a día vamos consiguiendo de a poco pequeñas victorias que, juntándolas todas, van a ser la gran victoria, para hacer que podamos presentarnos y nos reconozcan, pero es un trabajo arduo y bien lo sabes.

Entonces simplemente vengo a alentarlos nuevamente, sigan adelante, sigan avanzando y sigan amándose, sigan cuidándose y sigan irradiando la luz para que cada vez más seres humanos empiecen a recibir la luz y a comprender qué es lo que realmente pasa.

Les mando a todos mi intenso amor, Yo Soy MARIA MAGDALENA.